Inti Rayni

Con permiso de los ancestros,

Que la luz de Tata Inti continúe brillando y guiando el camino; que Pachamama con su ternura abrace en cuerpo y alma a todos los que a modo de peregrinos transitamos por el planeta en esta Abya Yala. Que Killa cobije los sueños de cada uno y alimente esperanza.

 

Estamos próximos a la celebración del Inti Raymi, un nuevo ciclo de nacimiento-muerte-nacimiento marca en nuestros corazones y se manifiesta en esta vida y con recogimiento Pachamama nos invita al retorno a lo sagrado.

Lo sagrado una manera de renacer a la vida, de recogimiento para luego dar fruto y que este fruto esté al alcance de todos en un modo de Ayni constante y comprometido.

Digo, sagrado y digo comunión; encuentro de almas que celebran en cada manera la corporización de lo heterogéneo en  las distintas maneras de consagrarse a la verdadera vocación: “La Vida”.

 

Estamos próximos a este acontecimiento cósmico en donde para el hemisferio Sur en el calendario se marca -21 de junio- como el inicio de la estación llamada invierno…,

“…la tierra reposa pero no deja de abrazar, reposa pero no deja de tener poder, reposa y continúa lo que debe ser. Como debe ser.

Dando paso a entonar y sintonizar con el ritmo del multiverso”.

 

En esta conjunción cósmica se manifiesta la invitación a celebrar Inti Raymi en que desde tiempos inmemorables los Amawtas nos han enseñado a venerar a Tata Inti –Padre Sol, dador de luz, calor- y  Madre Tierra -fuente inagotable de vida que nos provee las diferentes  formas de alimentos y medios para continuar esta cadena de convivencia con nuestros congéneres.

Sol y Tierra celebran este encuentro amoroso dando frutos con ayuda de la fuerza del trabajo humano.

Este, como tantos otros es el momento que en comunidad podemos dar gracias en esta eterna conjunción de Tata Inti y Pachamama y reconocer que somos energía brillando de diferentes densidades respondiendo a un único llamado: brillar como hijos del sol que somos.

¡¡Jallalla!!

wamani kunturi lokni